Cuando estoy cansada me da por pensar... y no por pensar en cosas en las que pensaría todo el mundo... no no... me da por pensar en teorías raras en las que nadie piensa...
Eso mismo me pasó en el coche volviendo del Moncayo (con el consiguiente cachondeo de Toño y Aragües...)
Y aquí están mis rayadas y conclusiones:
A quien se le ocurriría poner un pito en el primero coche? No hay una manera mejor de llamar la atención del resto de cosas que hay fuera? Y además, eso no es nada agradable para los animalitos que hay por la montaña... bueno, ni para los seres humanos... No se podría poner un sonido un poco mas agradable? Algo así como una persona gritando: USTÉ! entonces si que la gente se apartaría en la carretera... Aunque yo no sabía que estaba prohibido tocar el pito en ciudad a no ser que sea para evitar un accidento o llamar la atención de algo grave... Nunca te acostarás sin saber una cosa más... (aunque en este viaje han sido muchas cosas aprendidas...)
De todas formas, sigo sin verle una utilidad clara al dichoso pito o claxon... Si fuera por mi, lo quitaría de todos los coches... Y de todas las motos, que ese aún me parece mas estridente!
Aunque si una cosa tengo clara, es que el pito no esta puesto en mitad del volante de forma aleatoria... porque cuando más lo tocamos, como por ejemplo, cuando estamos en un atasco, estamos tan enfadados que en vez de apretarlo, lo aporreamos con fuerza... Esa es la explicación de que no sea tan solo un botón o una palanquita...
Bueno, y aquí dejo esto, que sino se va a convertir en un monologo... e iré directa al frenopático... que creo que por ahí ya tienen un par de plazas reservadas.... Estará el señor del pijama? Dejarán entrar a Grifa? Todo un misterio...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario